Con pros y contras

El Cuervo puede volver a jugar al Martearena: ¿será con Lules?

Se comunicaron con sus pares de Juventud para que las fechas de local no coincidan. Si es que esto se concreta, se jugaría con público en general y no sólo con socios.

Central Norte podría volver a jugar en el Martearena. Esto se desprende de algunas conversaciones que mantuvieron con sus pares de Juventud, donde le consultaron sobre la posibilidad de jugar un viernes o un domingo, según lo disponga Juventud, ya que por estar en una categoría superior tiene la potestad de elegir el día del encuentro por encima de Central, que milita en el Federal B.



La decisión tiene sus pro y contras. Por ejemplo, organizar un encuentro en el Martearena tiene otro costo, desde el operativo policial hasta la implementación de porteros y boleteros. En el plano económico, justamente, el club dice no estar para tirar manteca al techo.



En el plano deportivo, los jugadores y el entrenador no se refieren a este punto por cuestiones “políticas”, ya que por un lado la dirigencia pregona jugar en casa solamente con socios, algo que no está dando los réditos económicos esperados.



Cuando el Cuervo regresó a la Bombonera tuvo una concurrencia de más de cinco mil personas. Pero el efecto fue decreciendo y en el último encuentro sólo acudieron mil simpatizantes. La merma del caudal de espectadores puede ser una suma de varios factores: la Bombonera no cuenta con todas las comodidades; la gente tiene miedo a un rebrote de la interna entre los barras, que si bien es cierto no ocasionaron incidentes, se sabe que está latente el peligro de un recrudecimiento de la violencia entre las facciones.



Por otra parte, el plano futbolístico no despierta demasiada expectativa, toda vez que el equipo viene volteando muñecos y quizás el público espera la etapa definitoria para volcarse a la cancha.



El técnico Acosta, se sabe, es un hombre que programa todo su trabajo de manera progresiva y organizada. Y es el propio entrenador que quiere llevar a su equipo a jugar en un piso acorde a las exigencias. Se sabe que el Cuervo dejará su nido cuando lleguen los play offs, y jugar en ese estadio con el debido tiempo de antelación será una manera de aclimatar a los jugadores a un buen piso donde podrán desplegar todo su juego.



Se supo que, de prosperar la idea de jugar en el Martearena, podría darse ante el equipo tucumano de Lules, que será el último partido en condición de local que le queda en esta seria de tres encuentros en casa.

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