Le sacaron una foto por debajo de la pollera y luego vivió una pesadilla

En medio de un festival de música en el Hyde Park, en Londres, Gina Martin no se imaginaba que iba a ser víctima del "upskirting". La joven británica viralizó su caso por las redes sociales: un hombre le sacó una foto por debajo de su pollera con el celular. Indignada por la falta de importancia que le dio la policía, ahora busca que su testimonio sirva para convertir este tipo de acoso callejero en un delito. El caso llegó a TN.

En un relato exclusivo para la cadena BBC, Martin detalló que el hecho ocurrió el pasado 8 de julio. Mientras disfrutaba con su hermana de un evento de música, dos hombres se acercaron para ofrecerles papas fritas y conversar con ellas. Luego de un rato, la joven percibió que se estaban comportando de una manera "muy extraña". "Especialmente uno de ellos, que me miraba de arriba a abajo y comenzó a frotar su cuerpo contra el mío", detalló la muchacha.

Gina Martin estaba en un festival de música en Londres cuando un hombre la acosó.

"Aunque no sé bien cuándo lo hizo, él puso su teléfono entre mis piernas con la cámara apuntado hacia arriba y tomó una foto de mi entrepierna a plena luz del día", explicó Martin. La joven, que estaba mirando hacia el escenario, se dio cuenta de lo sucedido cuando vio que un tercer hombre estaba observando la imagen en su teléfono. Acto seguido, le sacó el aparato de las manos y empezó a gritar para pedir ayuda.

Una vez con los agentes de seguridad, Martin les comentó lo que había sucedido y le entregó el celular que contenía la foto. "Estaba muy asustada", reconoció la joven. Aunque al principio la policía le aseguró que lamentaban lo ocurrido y que "uno debe poder ir con una pollera a un festival donde hace 30 grados", los efectivos no cumplieron con sus expectativas. Los oficiales le dijeron que no podían "hacer mucho" ya que "en la imagen no se puede ver algo que consideren malo o perjudicial".

Martin estalló en llanto y quedó inmóvil ante esa respuesta. "En el estado de alteración en que me encontraba, no se me ocurrió pensar que esa era mi única evidencia de lo sucedido", agregó Martin en la entrevista.

El "upskirting" es la práctica de tomar una foto por debajo de la pollera de una mujer sin su consentimiento.

A los pocos días, la joven decidió tomar ella misma cartas en el asunto y publicó en su cuenta de Facebook el hecho. Al ver que se convirtió en viral y que muchas mujeres le contaron testimonios similares, Martin redobló la apuesta. En la página Care 2, una plataforma apoyada por activistas de distintas causas, la británica creó una petición para que la policía reabriera su caso. Hasta el momento, su entrada tiene más de 50 mil firmas.

"Me puse a investigar con abogados y me di cuenta que en mi país esto no es considerado un delito sexual. Yo quiero que esto cambie", apuntó Martin. La laguna legal que encontró fue la figura de "indecencia pública": pero se aplica solamente a exhibicionistas y debe ser denunciado por al menos dos personas.

Su presión en los medios logró que la Policía Metropolitana de Londres retomara su denuncia, pero la joven afirmó que hasta no lograr que se convierta un delito, no parará.