Los cuervos liman asperezas y se unen para lograr el ascenso

Se dijeron de todo. De ambos lados de la línea de combate dispararon munición gruesa en el pasado. Ni bien ganó las elecciones, el oficialismo descargó toda su artillería con la conducción que acababa de dejar el mandato. Pino Macaione, presidente, y Pablo López, vice, comenzaban la retirada luego de la derrota electoral y desde el frente Sabino – De Francesco arreciaban los proyectiles dialécticos y las acusaciones de subido tono.

“Esto ya quedó en el pasado, ahora es tiempo de mirar para adelante. Me arrimé a la dirigencia, sin ocupar ningún cargo ni nada que se le parezca, no me interesa. Lo único que busco es que Central Norte ascienda”, dice Pablo López, ex vice del club de la avenida Entre Ríos, quien estuvo compartiendo un asado con el plantel azabache. En esa reunión, López le pidió disculpas a Maino y Ceballos por cosas que él dijo en su momento y que pudieron haber afectado a los jugadores. “Los dos aceptaron mis disculpas”; explica López.

El ex directivo espera que el actual presidente también tenga un gesto de grandeza. “Él sabe que tenemos que hablar de las cosas que pasaron, pero fundamentalmente del futuro. A todos los hinchas nos mueve la misma pasión y el mismo objetivo, que es ascender”, señala.

Aunque no lo dice abiertamente, lo que López espera es una disculpa pública del presidente del club, que en su momento lo trató de “ladrón”, dijo además que López “lucraba con el club” y que “voy a trabajar fuerte para que esta gente no pise nunca más Central Norte”.

El tiempo pasó, y los cuervos se van dando cuenta que desunidos no llegarán a ningún lado, y que únicamente trabajando juntos pueden llegar arriba. “De mi parte estoy dispuesto a colaborar con lo que me pidan, no busco figurar ni entorpecer la tarea de nadie. Vine a sumar, nada más”, concluye López.