Revelan datos desconocidos del mendigo que emociona a todos los salteños

Su nombre es Abdul. Vive en la calle hace casi un año. Se gana el "pan de cada día" como vendedor ambulante. Es un hombre humilde, bueno, gran conversador y con una fe firme en Dios, pese a su situación económica y de salud (sufre ataques de epilepsia). Pero lo que lo destaca es su solidaridad con los perros que, al igual que él, no tienen un hogar donde dormir.

Generalmente se lo encuentra trabajando afuera del Banco Santiago del Estero (calle España, entre Sarmiento y 25 de Mayo) y por las peatonales. Por las noches, a veces duerme en la zona de la Terminal, o en la Guardia del hospital San Bernardo o al frente del super Carrefour de calle 20 de Febrero. Mayormente está en Plaza Belgrano al frente de la Central de Policía, después de las 22. 

No aceptó nunca ir al refugio que ofrece la Policía (operativo abrigo) por lo lejos que queda de su trabajo (el centro salteño). 

Algo que conmovió a los salteños recientemente debido a unas fotos difundidas por las redes sociales, fue que Abdul, a pesar de su situación, cuida muy bien de sus amigos perritos; cada uno tiene su nombre y su collar, los mantiene bien alimentados con alimento balanceado y cariño, y cuando duermen, hasta les coloca un cartón y una frazada para que descansen con mayor comodidad.

Como no eran de su talla, Abdul entregó a la Policía mucha ropa que le habían donado. Su intención era colaborar con los afectados en el interior tras las últimas lluvias. 

Cualquier ayuda es bienvenida para Abdul: alimento para perros, ropa, zapatillas (en buen estado) y comida... también unos minutos de charla son útiles para él.