Todo cocinado

Acuerdo político en Diputados para que el año que viene se vote con boleta electrónica

Se aplicaría en todo el país. Hubo dictamen con apoyo del massismo. Los gobernadores, claves para su sanción.

Tras dos meses de debate, Cambiemos logró dictamen en Diputados del proyecto de reforma política, que contempla la implementación del sistema de boleta única electrónica, auditada por la Cámara Electoral, que también tendrá el control del escrutinio provisorio.



Fue clave el apoyo del Frente Renovador y el Bloque Justicialista, pero de todos modos firmaron en disidencia y exigirán más cambios en la redacción final del dictamen que estará lista para mañana. O en tal caso, volverán a plantearlas en el recinto.



No pudo saldarse la puja sobre el sistema de votación en las primarias. Con respaldo del Frente Renovador, Cambiemos sostuvo la obligación de elegir a sólo una fuerza política en esa contienda, pero el Bloque Justicialista se opone, en línea con los gobernadores.



"Es un retroceso que en las Paso no se permita combinar candidatos de distintos partidos. No podemos obligar a los ciudadanos a armar su voto como lo imponga el Estado. Queremos que sigan armando su voto según su voluntad", exigió el salteño Pablo Kosiner.



En Cambiemos creen que podrán alcanzar los 129 votos sin ellos, pero la resistencia de los mandatarios trabaría la ley en el Senado. Tal vez encuentren una mejor excusa para impedir la boleta única electrónica, que poco les simpatiza.



Para evitar un nuevo cortocircuito entre diputados y senadores peronistas, José Luis Gioja intentaba convencer a sus pares kirchneristas para que no firmen un dictamen de rechazo.



El proyecto empezó con problemas al interior del oficialismo, porque María Eugenia Vidal prefería demorar la ley para que Sergio Massa no se beneficie de la BUE, una garantía de ahorro en impresión y en fiscales para la oposición de turno.



Para congraciarla, las espadas legislativas del PRO pensaron en un esquema de implementación gradual que excluya a Buenos Aires el año que viene, pero Massa reaccionó a tiempo y condicionó su apoyo a garantizar la boleta única en todo el país.



Anoche Cambiemos y el BJ le garantizaron la reunión de este mediodía a Cambiemos, al garantizar que la Cámara Electoral supervise el escrutinio provisorio y pruebe las máquinas el mismo día de la elección, con la facultad de suspenderla si alguna no funciona.



Pero esta mañana hubo nuevos plantos del massismo, como agregar en la ley la paridad de género en las listas y los debates presidenciales, dos temas que ya tienen dictámenes en el Senado. Quedó pendiente el debate para agrandar la composición del Congreso.



Cambiemos sólo aceptaría incorporar el cupo femenino, aunque la letra fina aún estaba por definirse para evitar anomalías.



“Vamos por primarias con un sistema D’hont intercalado, donde cada fuerza ocupe el casillero que gane con el género que le toque”, adelantó a LPO Juan Brugge, uno de los negociadores del Frente Renovador.



El esquema no podría replicarse en las elecciones generales, porque en provincias pequeñas, que eligen a dos diputados, un candidato podría hacer campaña para no poder asumir.



Otro reclamo massista es que la Cámara electoral sólo supervise los escrutinios de las elecciones presidenciales, mientras que los legislativos los derive en las juntas electorales federales de cada provincia. A Cambiemos le parecía demasiado complejo. 



Los jueces federales con competencia electoral de cada provincia designarán un delegado ante la justicia nacional electoral para organizar la logística de la elección.



Fue tanta la presión por monitorear el la BUE que Cambiemos sumó una bicameral con 16 legisladores para esa tarea. 



Además de no cambiar el sistema de primarias, el bloque justicialista, presidido por el sindicalista Oscar Romero, exige que si una de las mesas testigos elegidas en el escrutinio tiene diferencias con el conteo manual, se revise el circuito afectado.



El proyecto original sólo habilitaba un chequeo si hay 5 votos de diferencia en total de la muestra, que abarca el 10% del total. Exigen también mayor control en la auditoría en la emisión de actas.



El Frente para la Victoria-PJ no acepta ninguna máquina en la elección. “Sáquenle el chip a las boletas”, los desafío el chaqueño Juan Manuel Pedrini, quien cargó duro contra el presidente de la Cámara Electoral, Alberto Dalla Vía. “¿A quién le vamos a dar el escrutinio provisorio? ¿A un irrespetuoso absoluto que dijo que hay seis o siete provincias que no podían hacer elecciones?”, se preguntó.



El chip es el que permite transmitir el voto en las máquinas a un sistema de cómputos, cuya idoneidad ya está puesta en duda por la oposición. Para evitar ese reclamo, una alternativa que evalúa el Gobierno es aportar la tecnología de Arsat. La discusión está abierta. 

Comentarios

Tucomentario

Nombre

Más de Política