Llegó el día de la verdad: hoy se sabrá la condena a los policías que mataron a Nahuel

Nehemías Nahuel Salvatierra tenía 17 años cuando le dispararon en el rostro, se encontraba junto a otros adolescentes en el barrio Solidaridad. En el hecho quedaron implicados dos policías de la provincia.

El juicio arrancó a principios de octubre y hoy serán los alegatos. En el transcurso de la mañana se espera conocer el veredicto del juez Francisco Mascarello.

En la Sala VII del Tribunal de Juicio la acusación es en contra del cabo de la Policía de Salta, Juan Carlos Cardozo, por el delito de homicidio calificado; y el sargento Emiliano Gastón Aguilera Alanis por incumplimiento de los deberes de funcionario público y encubrimiento en perjuicio del adolescente Nehemías Nahuel Salvatierra.

Afuera del recinto judicial varias organizaciones, vecinos de la zona y familiares esperan el veredicto. Hace meses que claman justicia y que los responsables por la muerte de Salvatierra paguen una justa condena.

El hecho

Según lo informado por la Fiscalía salteña el asesinato de Nahuel Salvatierra (17 años), ocurrió el 3 de enero de 2018, en las calles Martín Fierro y Fortín Las Juntas, cerca del predio de la feria de Solidaridad.

Alrededor de las 10 de la noche aparecen en escena los dos policías en una motocicleta de 110 cc, conducida por Cardozo. Los uniformados circulaban por Martín Fierro de Norte a Sur, cuando se toparon con dos grupos del lugar, quienes lanzaron insultos a los uniformados.

Foto: Fiscales Penales de Salta

Los policías llegaron hasta la esquina de Fortín Las Juntas, donde giraron en "U" y se quedaron de frente a tres jóvenes de "La Ranchada", entre los cuales estaba la víctima. Al detenerse, y primero desde la moto, los uniformados le ordenaron a los mismos que se replegaran. Los jóvenes permanecieron en el lugar y los efectivos amenazaron con disparar. El sargento Aguilera descendió de la moto para tratar de intimidar a los jóvenes para que se retiraran. "Tirá si te da la nafta" dijo uno de los tres muchachos, quien prestó declaración testimonial. Tras lo cual, Cardozo tomó su arma reglamentaria, apuntó a uno de ellos y disparó.

El impacto fue letal, ingresó por el ojo derecho de Salvatierra y lo derribó en el acto. El estallido provocó la corridas de los jóvenes, mientras que los dos policías también se dieron a la fuga de la escena del crimen, sin tomar los recaudos del caso, a los que están obligados dada su función pública.